Aniversario competitivo


Hoy, 6 de marzo, es el 111º aniversario de la fundación oficial del Real Madrid Club de Fútbol, el club más grande de la historia del balompié, de la mano de los hermanos Padrós en 1902. Lo hace con una buena salud competitiva y como muestra de ello, es el partido de vuelta de octavos de final de la Champions League.

Se llegaba con un nivel de euforia lógica por los dos Clásicos en 5 días pero no estaría mal recordar que enfrente estaba el líder de la Premier League, el Manchester United. La opinión generalizada intuía que todo iba a transcurrir con los merengues atacando en estático (según parece, algo que no saben hacer) y los diablos rojos esperando las contras. Con el pitido inicial se vieron otras cosas, Ferguson puso a Welbeck sobre Xabi Alonso y la salida del Real Madrid estaba atascada.

Tampoco deshacían el tapón los Ozil, Di María, Cristiano Ronaldo (muy ansioso durante los 90 minutos) y demás hombres de ataque. Casi finalizando la primera parte se lesionó Di María y el cambio de Mourinho fue sacar a Kaká. Un verdadero acierto porque hizo que el control y la movilidad del balón fuera madridista. A todo esto en los primeros 45 minutos hubo algunas jugadas aisladas de ambos conjuntos, si bien el ManU las tuvo más claras, con dos paradas de Diego López.

La segunda parte seguía con la misma tónica, al menos hasta que el Manchester se adelantó por el gol en propia puerta de Ramos. Había offside de Van Persie al inicio de la jugada, pero era tan ajustado que a veces se pita y otras no. Fallo en cadena de todos y a seguir buscando el gol, para dar en este caso con la prórroga. Con 1-0, el entrenador escocés mandó sus huestes a replegarse. Mou abrió el campo poniendo a Higuaín a la derecha y ordenando que llegara la segunda línea.

En eso estábamos, cuando un despeje de Evra lo intenta controlar Nani pero está más rápido Arbeloa y ¡pum! patada en el costillar del 17 blanco. Llega el colegiado turco Cüneyt Çakır y expulsa al portugués. Como nadie se pone de acuerdo con la tarjeta roja, la mejor forma de saberlo es responder a la pregunta ¿si hubiera sido Pepe, que tarjeta habrías sacado?.

A Mourinho no se le puede negar que es un entrenador como la copa de un pino, y contra diez realizó el segundo cambio quitando a Arbeloa y metiendo a Modric para manejar el cotarro. Sí, la expulsión fue clave, pero también hay que tener jugadores que sepan lo que hay que hacer con el balón en los pies. Además, Rafael se transformó en el tercer brazo de De Gea para salvar un cabezazo de Higuaín. Modric empezó a moverse de un lado a otro. Así fue todo, hasta que una de las veces a Modric le dio por disparar a puerta (en la repetición se ve que no estaba perpendicular a portería) y marcó el tanto del empate. Eliminatoria igualada.

A falta de 25 minutos, había que seguir igual y con el empate nada cambió. Manchester encerrado y Madrid jugando en estático. En una de esas, combinación de Modric para Higuaín, se la devuelve a Ozil que de tacón hace la pared con el Pipa, éste hace el pase de la muerte y Cristiano Ronaldo aparece como un rayo al segundo palo para lograr la remontada. Históricamente, el Real Madrid siempre ha sido de remontadas y ayer no iba a faltar una de ellas.

Con el objetivo de la remontada cumplido, Mourinho quitó a Ozil y puso a Pepe para reorganizar la defensa. Todos atrás y el Manchester United que empezó a apretar, en los últimos minutos. En esos momentos apareció la figura de Diego López para ser una muralla y los contragolpes de CR7 con Kaká y Modric. Lo dicho, estaba la cosa controlada pero se convirtió en un riesgo innecesario. Al término de los 5 minutos de prolongación se consumó la clasificación para cuartos de final.

El Real Madrid volvió a ser competitivo, se alejaron los fantasmas de las eliminaciones prematuras y algunos hablarán del árbitro, será porque entienden del asunto. Pero al fin y al cabo, la que podía haber sido una semana negra quedándose out de todas las competiciones ha pasado a ser una gran semana, la semana blanca como se hace en los colegios. El único punto negro es la Liga, pero si se sacan adelante las demás competiciones entonces no habrá sido mal año.

Como indicaba al principio, en el aniversario del Real Madrid quiero citar el comunicado oficial de la fundación del club (sacado de la Wikipedia):

“Juan Padrós y Rubio, del Comercio de Madrid, que habita en la calle de los Madrazo, 25-3Q izquierda, a V.E. respetuosamente expone: Que con objeto de constituir una Sociedad de juegos de Sport, que se denominará MADRID FOOT BALL CLUB, le acompaña las bases por que ha de regirse, para su aprobación.”
Juan Padrós. 6 de marzo de 1902. Madrid

Dos Clásicos, dos victorias


Hacía tiempo que no se veía al Real Madrid ganar dos veces en tan poco espacio de tiempo al "superequipo", según algunos, del F.C. Barcelona. Y es que han sido dos partidos trepidantes donde se ha impuesto la estrategia de Mourinho sobre el planteamiento de Roura/Tito o la "autogestión" de los culés. Pero voy por partes, para hablar de cada uno de los partidos disputados.

En la vuelta de la Copa del Rey, la táctica del Real Madrid fue sencilla: ahogar al rival en su zona de creación y presionar arriba para que sin zona de creación tampoco tuvieran espacio/tiempo de pensar otras posibilidades. Muchos dirán que el Madrid jugó a la contra, pero es obvio que si se roba el balón se aproveche la velocidad de la gente de arriba para montar el ataque. En cuanto al partido, el Barça parecía querer demostrar que tiraban a puerta, por eso en los primeros 5 minutos dispararon mas que todo el día del Milán. Después del típico achuchón inicial local, en un rondo de siempre, se produjo un robo el balón que pasó al Pipa y éste dio el pase en profundidad a Cristiano. Lo siguiente fue la bicicleta acompañada de un clamoroso penalty de Piqué, incomprensiblemente protestado. Cuarto de hora y los merengues que se aseguraban una hipotética prórroga.

Pero todo siguió transcurriendo como se esperaba, un Barcelona sin ideas y un Madrid comodísimo esperando cazar una oportunidad. Y esa llegó con un pase (otros comentan que despeje) de Khedira para la carrera de Di María. El argentino dejó a Puyol como a una bailarina de ballet, disparó y el rechace de Pinto lo cogió Cristiano Ronaldo para hacer su segundo gol. Eliminatoria acabada. La guinda final fue el tercer gol que rubricó Varane para firmar una magnífica actuación en las semifinales. Por mucho que les duela a algunos, que no lo reconocen, fue un baño táctico en toda regla de Mourinho. A la final de Copa contra el Atlético de Madrid.

De la Copa a la Liga. Con la clasificación en la mano, esta vez el planteamiento era claro: como el martes es el partido de Champions, pues a sacar los no habituales e intentar recortar las diferencias en Liga. Y así fue, con Morata de inicio, Pepe en la media, CR7 y Ozil en el banquillo, etc. Enfrente el Barcelona con la artillería pesada, para que vamos a engañarnos querían ganar y sentenciar la competición.

Pero como en Copa, el Barcelona era mucho toquecito insulso en la media (por ahí hay gifs definidos como "Fútbol de ataque") que además no conseguían desgastar al rival ya que no avanzaban metros. Esta vez el gol blanco llegó mas temprano, en el min. 6 con un gran centro de Morata, desde la izquierda, y Benzema remachando en boca de gol. Quizás sería la hora del partido pero todo estaba muy relajado, y un ejemplo de ello es el gol del empate. Por fin el Barça encontró un resquicio para meter el gol, con la aparición estelar de Messi (estelar de estrella fugaz). Con empate se llegó al descanso.

En la segunda se vio otra cosa, al poco de comenzar Mou mandó a CR7 a salir al terreno de juego. Y vaya cambio, en cuanto salió Cristiano Ronaldo, si ya Messi estaba missing, el Barcelona le costó mucho pasar de mediocampo. Está claro que el portugués ha conseguido una cosa, asustar al rival con su sola presencia. El partido se revolucionó en su justa medida y, como ocurrió en Copa, un saque de esquina y gol de cabeza con la diferencia del goleador, en este caso fue Sergio Ramos.

Para cuadrar el partido, nos vamos a la última jugada del partido con un penalty inexistente sobre Adriano donde pega un salto que ni en los JJOO se ve. Esto desató y demostró que el Barcelona siempre será igual contra el árbitro en el terreno de juego y fuera de él, tirando esos supuestos valores que predica a la basura. Lamentables Piqué y Víctor Valdés al acabar el partido acosando al colegiado. Al portero le debe caer una buena retahíla de partidos de sanción.

Resumiendo, estos dos Clásicos iban a ser la tumba del Real Madrid, y como consecuencia la de Mou, pero se ha comprobado que este muerto está muy vivo y todavía queda el encuentro en Manchester que llega en el momento clave del año.